
Durante el año 2018 se inició en Chile la generación de normativas de calidad para olores ofensivos. La autoridad definió normar según tipo de actividad y priorizó de las industrias de acuerdo al número de quejas recogidas históricamente. Del análisis realizado, fueron cinco las industrias seleccionadas para la primera etapa, entre las cuales está la industria de fabricación de celulosa Kraft, que en Chile alcanza aproximadamente a un 2% de la producción mundial.
La falta de regulación territorial, las quejas de la comunidad, la ausencia a la fecha de normativas de calidad y la poca o nula experiencia internacional y bibliográfica de cómo proceder para la gestión de olores en este tipo de industria, contribuyeron a crear la creciente necesidad de generar herramientas de pronta respuesta, en línea, integradas, y que permitieran gestionar acertadamente el impacto odorante.